martes, 3 de marzo de 2009

DESIERTO Y OASIS

Hoy (27/01) tenía planificado la travesía a Pampa Frutilla y al volcán Casablanca, pero a último momento hice un cambio de planes y me dirijo hacia El Caulle para subir hasta el refugio, que a 1400 metros de altura es el paso obligado antes de ascender al cráter.
Mi intención es seguir el sendero rodeando el volcán en dirección Oeste hasta llegar a las aguas termales que se denominan "Los Baños".
Recordaba, del viaje anterior, lo arduo de la subida. Pero en esa ocasión la difícil tarea les había tocado a los Caballos.
Luego de una linda llanura donde las bandurrias pasean tranquilamente en busca de insectos que comer y las vacas te miran con esa mezcla de curiosidad e indolencia, comienza una breve subida que te lleva a otra plácida pampita. En ese lugar un gran coihue es abrazado en un rapto de amor asfixiante por una celosa enredadera, no sabe que en la muerte de él esta la de ella.
No es lo único que existe en la zona pero me recuerda que portentoso y vulnerable son atributos que pueden estar juntos en la vida.
Por fin comienza la “verdadera” subida, una pendiente que nos lleva un poco mas de tres horas a Kevin y a mi hasta alcanzar el refugio mas o menos a 1400MSNM.
Kevin es de estados unidos, según se define, y tiene a su familia en New Jersey, aunque hace un año que vive en Santiago de Chile dando clases de Inglés. Enamorado del idioma español después de una temporada en España que incluyó unas Fallas que lo dejaron alucinado ¿y a quien no?
Me resulto muy agradable su compañía y charlamos de muchos temas referidos a su país: Bush y su terrible gestión, la esperanza que significa Barac Obama y hasta sobre las criticas sociales que hace Michael Moore en sus películas y libros. Nada, lo normal cuando subes una montaña con un montón de kilos a la espalda y te esperan unas horitas sudando la camiseta!
Llegamos a la hora ideal para una siesta, asi que luego de montar la tienda me entregue a los brazos de Morfeo con la firme convicción que me lo tenia merecido.
Kevin luego de un descanso inició la subida al cráter, yo lo dejaría para la mañana siguiente por que sería parte de mi camino a las aguas termales.
La siesta duró poco. Un grupo de desalmados Israelitas se pusieron a hablar a los gritos luego de montar sus carpas casi al lado mio…Señores, no les alcanzaba toda la montaña o es que mi sexapil trasciende fronteras!!!
Ni hablar, son personas desconsideradas con el prójimo!
Esa noche, luego de una cena a base de arroz ¿o era pasta? (en todo caso solo podía ser una de esas dos opciones), tomé de la naturaleza uno de sus mejores ofrendas. Puse mi bolsa de dormir al revés y con el cierre (cremallera) abierto de la tienda disfruté de la noche cordillerana plagada de estrellas y una luna majestuosa vagando por el cielo. Me perdí en él. Me dejé llevar por cada guiño cómplice de pulsares y novas, caí literalmente en ese vacío que no es tal, en esa oscuridad en la que nuestra imaginación ancestral encontró preguntas y dibujó respuestas.



La mañana siguiente me encontró descansado y a las 8:15 empecé a caminar. El sendero transcurre en dirección al cráter del volcán en subidas progresivas y a unos quinientos metros desde el refugio, aproximadamente, cambia de dirección hacia el oeste rodeando a la montaña.
El sol, tibio aun, deja de estar a mi derecha y se acomoda indolente detrás de mi. Ese será su lugar durante casi toda la jornada de camino.









Apenas dos horas y media después veo, a lo lejos pero con toda nitidez, el rio de lava. Tres brazos de material incandescente surgieron de la tierra y formaron un solo y caudaloso rio. Afortunadamente de pocos kilómetros de extensión.







Su negro perfil engaña, congelado en un eterno movimiento estático, apenas se puede creer que esa pared mida entre 50 y 60 metros de altura.












La vista panorámica que dejo atrás también impacta. A mi espalda gran parte de la cadena volcánica de la región es como un ondulado escenario. De derecha a izquierda y con su cono blanco de nieves eternas esta el Osorno, luego el Puntiagudo, el Casablanca y en el extremo mas alejado el Cerro Tronador, limite entre Argentina y Chile.






El Valle esta completamente tapado por una densa capa de nubes y allí, donde normalmente se ven los Lagos Rupanco y Puyehue solo se percibe un blanco acolchado.











Lagos Rupanco a la izquierda y el Lago Puyehue , las mismas fotos en dias diferentes.










Sigo mi camino por momentos adivinando el sendero que pasos intemporales crearon y mantienen, larga serpiente que se ondula respetando los caprichos de la tierra.


















Algunas cañas señalizan la senda pero el desierto a veces las incorpora en su camuflage y requiero un esfuerzo añadido de mi vista.







Dejo el faldeo de la montaña y me introduzco, casi sin darme cuenta, en pleno desierto andino aproximadamente a 2000 metros de altitud. El paisaje es inhóspito y el silencio tiene entidad propia, sin embargo la sensación difiere de la soledad. Creo que estoy conectado a las dunas, el cielo azul y al susurro de la brisa.



















El calor del sol ya es intenso y decido descansar un momento, llevo solo lo necesario pero aun así el peso es bastante. Una de las desventajas de viajar solo. Otra muy importante es el no poder compartir estas experiencias y las emociones que me producen.
Llevo aproximadamente cuatro horas de camino y noto, al principio, un cambio sutil, un ruido apenas audible diferente y extraño en ese lugar. Ya no solo es el viento, me parece oir el murmullo del agua.






De un agujero en un pequeño barranco brota agua fresca y es el comienzo de una herida verde que cruza sin remedio parte del desierto. Un oasis da vida a los helechos que dibujan una cinta a cada lado del curso de agua.
El murmullo de las pequeñas cascadas me impulsa y al poco descubro otro río.












En un momento me encuentro caminado entre dos cursos de agua, en una especie de istmo que da una perspectiva casi irreal de dunas ocres, aguas azules y el verde brillante de la vida.
Estoy alegre y ya casi ni siento el peso de la mochila, vivo este momento con mucha intensidad.
Me falta poco para llegar a destino y vadeo el agua mojandome hasta la rodilla; buen momento para otro descanso y para darle tiempo que los calcetines se sequen un poco.
Poco después y ya casi llegando a Los Baños empiezo a ver las fumarolas, especies de chimeneas naturales que emiten humo sulfuroso, y que indican una sutil actividad volcánica.



Es increíble ver las vertientes de agua termales y sentir la temperatura del agua
verdaderamente caliente.











Monto la carpa a la orilla del rio y me dispongo a comer queso y un rico salame, estoy hambriento!!!




















Las aguas del río y la de la vertiente termal confluyen y de manera natural se crea una poza que me permite darme un baño. La sensación es fantástica y mi cuerpo me agradece este lujo.















El resto del día y parte de la mañana siguiente me dedico a explorar el entorno y descubro el nacimiento de otro rio y fumarolas mas cercanas.



Una familia de patos silvestres se asombran de verme y sin quererlo me dan otro motivo para alegrarme el día. Me encanta ver animales en su entorno e imaginarme que realmente podemos vivir respetando su habitat.














El paisaje me sigue asombrando y el cielo azul es el marco adecuado que perfila las dunas en una ondulación sin fin de luces y sombras.

domingo, 25 de enero de 2009

EL VOLCAN OSORNO

El Parque Nacional Puyehue se encuentra en la zona mas oriental de la provincia de Osorno, en la Xª Región chilena. El paisaje es similar al del lado argentino para la misma latitud. Quizás con mas zonas “despejadas”, praderas verdes y amplias, ideal para la cria de ganado. La arquitectura, aun en las zonas urbanas como Osorno (la capital de la provincia) es mayoritariamente de madera. La gente es muy cordial y educada. Todo el mundo me trata de “señor” o “caballero”, aquí el “vos” es poco menos que un vocablo despectivo que nadie utiliza, a menos que quiera ofender. Hoy estoy en Osorno. He ido a comprar los víveres que necesitaré en la montaña y a buscar información para la comunidad mapuche sobre el diseño de una web y cómo facilitar su el acceso de Internet. Algo muy necesario para el desarrollo de su empresa.
Casi por casualidad, o quizás debiera decir por causalidad, conocí a Omar Hernández. ¿por qué causalidad? Quizás por que empiezo a comprender el poder de las metas claras; a lo largo de este viaje mi proyecto sur significa patear, respirar, vivir, realmente conectar con la tierra, el agua y el aire. Significa un nuevo rumbo en mi vida que quiero y voy en ese sentido, por lo tanto no hay remedio...voy a lograrlo.
Por eso cada paso que doy y cada persona que conocí y voy conociendo me señala un camino, una puerta nueva, una luz mas clara y potente.
Omar es uno de los organizadores (yo diría el “alma Mater”) de la competencia de Mountainbike que se realiza desde hace seis años y que parte desde Villa las Cascadas, una preciosa aldea cercana al imponente Lago Llanquihue. La carrera tiene 77 km de recorrido de los cuales, alrededor de 25 corresponden a senderos de montaña.




El camino desde Osorno hasta Las Cascadas de por si es precioso y en todo momento domina el paisaje la nevada silueta del volcán. A nuestra derecha se extiende, por kilómetros, el Lago Llanquihue que se eleva 51 metros sobre el nivel del mar y que será el primer gran lago que veré ese día.
La Conquista al Volcán Osorno supone un recorrido que prácticamente circunda en 360º al maravilloso macizo con un cono glaciar casi perfecto.




Omar me propone acompañarlo a señalizar la ruta que seguirán los competidores en el tramo de montaña y acepto casi sin pensar.










El primer tramo son 18km y parte a unos 200 metros del refugio que Tomas Held y Lorena construyeron como verdaderos profesionales, desde donde la cumbre se ve de manera majestuosa (Gracias chicos!!!, el jugo natural de manzana y el sándwich fueron un verdadero tesoro a lo largo de ese día).




















A unos 1000 metros transitamos una llanura en el faldeo del volcán, enfrente destaca el cerro La Picada de origen volcánico que le da nombre a la zona.




Al fondo, un invitado de excepción: el cerro Tronador, la montaña mas alta de esta parte de la cordillera que se enmarca en un cielo azul profundo. Con sus tres picos, el Tronador se constituye en límite natural entre Argentina y Chile.














A medida que avanzamos señalizando la ruta cruzamos la pampa Desolación, el calor y el terreno pedregoso le dan significado a tremendo nombre.












Sin embargo casi al finalizar su recorrido y luego de una loma la naturaleza me sorprende de nuevo: el Lago de Todos los Santos imita, con su agua verde esmeralda, las siluetas de las montañas que lo circundan. En lo alto, dos cóndores aprovechan las corrientes de aire caliente ascendentes para planear, casi sin esfuerzo dominando todo a su vista. Cada tanto, elegantemente, pliegan sus alas para modificar el rumbo y se alejan al abrigo de las montañas. Es uno de esos momentos en donde la conciencia de lo pequeño que soy ante tanta maravilla me abruma y me emociona. Soy un observador pero también, en ese momento único e irrepetible, soy parte de ello. Una pieza pequeña pero necesaria.







El perfeccionismo de Omar hace que recorra el sendero varias veces, como si quisiera ponerse en la piel del competidor y valorar todas las posibilidades de reacción. La señalización es minuciosa y profesional. Realmente sabe lo que hace.
El calor es sofocante que se acentúa en los momentos que avanzamos al trote; nos esperan al final de ese trayecto para llevarnos a otro sendero y el tiempo escasea.
Aprovecho y cada cierto tiempo disparo fotos al volcán. Al final del día creo que tendré imágenes de todo el perímetro de la montaña.
Es descenso es bastante pronunciado y casi al comienzo de la selva valdiviana llegamos a un río de agua oscura, marrón por los sedimentos volcánicos. Es la primera vez que lo veo en una montaña, por lo general el agua es fresca y cristalina; en ese momento es una desilusión: tengo mucha sed y la necesidad de mojarme la cabeza. A este tipo de ríos se lo denomina Lahar.
Llevamos un buen ritmo y ya debemos haber superado los 15 kilómetros. Aproximadamente tres kilómetros antes de llegar a la orilla del lago empezamos a trotar de manera contínua. No puedo dejar de pensar en Emil Zátopek un atleta checoeslovaco que entrenaba con botas militares y fue campeón olímpico en 1948. Lo recuerdo y me doy cuenta de lo importante que una persona puede ser para otra, aun sin conocerla. De cómo ciertos modelos generan una impronta en nosotros que como vientos o brisas nos conducen por este mar que es la vida. Gracias a toda esa gente que es parte de mi lo sepan o no, lo sepa yo o no.
Al fin llegamos a Petrohue o “lugar de petros” según la lengua mapuche petros se llaman a los tábanos (tan molestos como en España, pero el doble de grandes); así que ya se pueden imaginar el panorama!!!!

No retraso mas el momento y me acerco a la orilla del lago para mojarme. Es un placer sentir que el agua fresca empapa mi cabeza y recorre mi espalda, en ese momento no me importa mojarme las botas, todo es secundario. Bebemos todo lo que podemos y poco después iniciamos otro sendero que nos llevará a través de 7 kilómetros hasta completar la circunferencia del Osorno.







“El Solitario“ en su mayor parte es un sendero que transcurre por selva con un tramo pedregoso en la parte central del recorrido. Si bien nosotros lo hacemos caminando, no puedo dejar de pensar en la dificultad para los competidores en bici. El mountainbike es mucho pal body!!!

















La cumbre del volcán Osorno es un cono perfecto de blancos y ocres, y desde la distancia en la que nos encontramos se puede apreciar algunas tonalidades de azul eterno en la nieve.










En el ultimo tramo del sendero, éste se vuelve mas estrecho y adquiere esa penumbra y frescura típica de la selva de coihues, lengas y ñires; también los avellanos dan color con sus frutos ahora rojos mientras algun arrayán por aquí y allá aporta tonalidades color canela al claroscuro de la tarde.
Pasan de las seis cuando llegamos al final del Solitario y eso supuso unas 8 horas de trekking desde que comenzamos.









Nos esperan al final del camino para llevarnos de regreso a la Villa Las Cascadas.



Lo primero que hago al llegar es comprar una inmensa botella de coca-cola y hago una revisión mental de mi cuerpo, digamos una introspección para ubicar que me duele mas. Por el momento ganan mis pies por tres ampollas a cero. Sin embargo valió la pena conocer tan de cerca a esta impresionante mole que es el volcán Osorno.
En verdad se lo denomina estratovolcán y tiene un volumen de 250km2 y una altura de 2562 MSNM. Esta formado por lamas de composición basáltica y andesiticabasaltica.
Su característica cima de forma cónica presenta un extenso glaciar de 0,14 km2 con azules nieves eternas. Después de ver el cráter del volcán Puyehue mi idea era que todos los volcanes tendrían un agujero en el medio, sin embargo el Osorno tiene localizado en sus flancos una veintena de cráteres adventicios, fisuras y conos de escoria.
Su ultima erupción ocurrió hace unos 130 años y actualmente el volcán solo presenta una débil actividad fumarólica bajo el hielo de la cima.
El termino estratovolcán refiere al edificio volcánico mayor formado por una alternancia de lavas y depósitos piroclasticos y construido por erupciones sucesivas desde un centro de emisión principal.
Estos datos los tengo gracias a haber ido a la escuela....a la escuela primaria de Villa La Cascada en donde un ilustrativo panel informa no solo de las características del volcan sino de los posibles riesgos de vivir cerca de él.
























TREKKING HACIA AGUAS TERMALES






























VISTA DEL CRATER DEL VOLCÁN PUYEHUE 6 KM DE DIAMETRO




17 de enero de 2009

Hoy me reuní con con Norma y Marcos, presidenta de la comunidad mapuche y el administrador del complejo, y les comenté los avances con respecto a mi proyecto de “Turismo aventura alternativo”. Hablamos sobre las actividades que podríamos impulsar.
En ese sentido programamos las próximas salidas que realizaré en la montaña cercana, cada una de ellas de tres dias cada una.








Una de ellas supone subir hasta el volcán Puyehue y luego dirigirme hacia “los baños”. En ese lugar hay pozas de aguas termales similares a piscinas, cercanas a un arroyo de deshielo. La gente del lugar sugiere bañarse en las aguas termales y luego un chapuzón en el agua helada. Dicen que eso revitaliza….o te deja seco!!!
Entre 4 y 6 horas desde el volcán son necesarias para llegar y luego, si me da el cuero, puedo llegar hasta unos geisers a unas 2 o 3 horas mas de camino.
Esto supone un día alojado en el refugio de El Caulle y otro dia en carpa en plena montaña. Estaré solo y espero no encontrarme con algún puma o por lo menos que sea vegetariano!!!















Otra excursión es hacia la “Pampa frutilla” que toma su nombre por las fresas silvestres que crecen allí. Será cuestión de llevar crema/nata.
Desde pampa frutilla el camino me llevará hasta el volcán Casablanca, distante unas 7 horas aproximadamente y de ahí bajar para que alguien me recoja en el complejo aguas calientes. Mis cálculos indican unos 40 km recorridos al final del itinerario. También supone un par de noches acampando en la montaña.














Por la tarde me encuentro con Carlos que apenas me conoce, es que no esparaba verme allí. Vamos asu casa y de nuevo florece la hospitalidad y el cariño en la sonrisa de Olivia. Conozco a Andrés, uno de sus hijos y resulta tan agradable como sus padres. Durante los próximos dos días prácticamente me adoptan y comparto con ellos muchos momentos de su vida cotidiana. Inexplicablemente también las comidas y las cenas ¡que casualidad!!! (la increíble atracción de la comida casera).



















Una de las actividades que mas me gustan es la recolección se cerezas (otra casualidad, extraña ¿no?). Aunque niegue haber comido alguna, me delata la cara de satisfacción y unas extrañas manchas moradas en la comisura de los labios.



























Los Vargas tienen una treintena de crias de jabalí y es una pasada verlos correr para comer las cerezas que se me caen, por lo visto compartimos los mismos gustos gastronómicos.



jueves, 22 de enero de 2009

COMUNIDAD ÑIELAY MAPU


16 de enero de 2009

A las 12:00 del 16 de enero tomo el colectivo que me llevará a Anticura (Chile). Dia pesado, de lluvia que hace mas insoportable los tramites aduaneros. ¡uffff, que coñazo!!!
Llego al complejo “etnoturismo anticura” gestionado por la comunidad mapuche Ñielay Mapu que significa “no tenemos tierra” en una clara alusión de la lucha que llevan adelante desde hace años este grupo étnico por el derecho a vivir dignamente. Me alojo en el albergue que dispone el complejo, una amplia cabaña muy bien equipada, que por una noche comparto con turistas alemanes. Y que después será “solo mia” , una gran cabaña con baño privado…un lujo para el caminante de la montaña!!!

Poco después salgo en dirección a la casa de Carlos y Olivia, unas personas maravillosas que regalan buena onda, cordialidad, hospitalidad y que ofrecen su casa y su corazón. Soy una de esas personas que disfrutan de su compañía y puede considerarme su amigo. ¡un abrazo querida familia!!
Una lluvia fina e intermitente me acompaña de camino a la casa que se hace mas largo de lo que lo recuerdo y encima esta empezando a oscurecer.










De todas maneras los paisajes, aun desde la carretera son preciosos como la cascada de los novios que esta a pocos kms de Anticura.


O los exuberantes helechos como la "nanca" que se utilizan para hacer curanto, una comida tipica aborigen. Se hace fuego en un pozo en la tierra donde se calientan piedras y luego sobre las piedras se coloca carne, verduras, calabaza y tuberculos. Por ultimo se tapa con este helecho y telas y se vuelve a tapar todo con tierra. En una hora y media se puede comer. El ritual es interesante y si tenés hambre el plato es exquisito.










En fin…que equivoque el camino y casi sin darme cuenta volví a la aduana chilena, habia caminado 6 km por la ruta que une el Paso fronterizo Pajaritos con Osorno.
Nada, que tocó regresar tambien caminando y totalmente empapado. Supongo que Herr Julia estará satisfecha, 12 km al dia hace bien al body. Besitos a mi nutricionista!!!

DE PASO POR BARILOCHE






14 de enero de 2009

VURILOCHE significa “gente que vive en el interior” en mapudungun, lengua mapuche y es el vocablo del que proviene el actual Bariloche. Es una ciudad volcada al turismo a orillas del lago Nahuel Huapi donde estudiantes de vacaciones, mochileros y “urbanitas” disfrutan de una de las realidades de la patagonia andina, aunque no la unica.
En Bariloche, luego de un montón de llamadas para conseguir alojamiento, al fin me decidí por el camping “selva negra” la razón: 180$ en un hostel, el mas barato Vs 60$ por dos noches en el camping. ¿obvio, no?
Al final le saqué mucho partido a esta improvisada escala en el viaje. Conocí a tres moteros que estaban conociendo nuestro sur. Por un lado Nestor y Alex de Bahia Blanca (Bs. As.) y por otro lado Pedro, chileno pero radicado en Brasil desde hace mucho tiempo.

Con Pedro compartimos un asado que me animé a hacer y que creo me salio bastante bien sobre todo la ensalada. (hey Pedro, mandame la foto del asadito!!!),





Con Néstor compartimos algunas largas e interesantes conversaciones. De esas que hacen que uno reflexione en voz alta sobre las cosas importantes de la vida. ¡¡animo, Néstor, te espera un buen futuro. Solo tenés que vivir plenamente el presente!!!
Cuando vuelva a argentina con mi moto podríamos hacer un viaje creo que Nestor sería una buena compañía. El problema es que se morfa las frambuesas, jejeje







Ahhh, Gracias por la parrilla de camping, es un super regalo.!!!
¿Qué tal la concentración de Pihue?
Pedro es un personaje que parece haber nacido sobre una moto (actualmente una honda 350Cc), con muchas vivencias y una manera clara de ver la vida. Quizás nos veamos alguna vez en Florianópolis, con una caipirinha de por medio y repitamos el asadito ¿te tinca?.